Fumar es el método que ha prevalecido desde tiempos antiguos y es uno de los métodos más efectivos y rápidos de consumir los compuestos de la planta.
Algunas personas han dejado de fumar el “cigarrillo” o "joint" de cannabis ya que lo encuentran poco saludable, ya que existen creencias que puede tener elementos carcinógenos, similares a los del cigarro de tabaco. Fumar cannabis a través del “cigarrillo” puede resultar algo irritante por las cantidades de humo que entra en los pulmones.
Cuando fumamos cannabis el efecto “high” puede durar varias horas dependiendo de la potencia del “strain”, así como el número de inhalaciones y de la experiencia con la planta. ¡Como olvidar un joint de Sour Cookies con 26% de THC!
Al igual que otras flores y plantas, la calidad del cannabis depende de varios elementos:
· La cannabis de calidad se ve y huele muy superior a la de baja calidad, ya que está llena de tricomas que a simple vista se ven como una “capa” de color gris o blanco.
· Tiene mayor potencia
· Las mejores plantas son libres de pesticidas y moho
· Son plantas orgánicas
· Se secaron y “curaron” bajo control de calidad
Una cannabis de mala calidad y potencia huele a “pasto quemado” y los efectos son mínimos.
Cuando la planta de cannabis es cosechada, el siguiente paso es podar las flores (buds) para quitar las hojas llamadas “sugar leaves”. A este método se le llama “trimming” y se puede hacer de forma manual o en máquina. En algunos casos hacer el podado en maquina puede remover demasiados tricomas y hacer que la flor pierda calidad y potencia.
Una vez que hayas fumado el “cigarrillo”, también te darás cuenta de la calidad de la cannabis si la ceniza es blanca y brillante y que no tuvo pesticidas ni fertilizantes. En algunos casos podrás ver una resina color ambar oscuro que escurre por el cigarrillo, lo que significa la alta calidad de la flor. Después de que los “buds” han sido cortados y podados, necesitan permanecer algún tiempo en frascos para su “curado”. Mediante este proceso se quita la humedad restante. A simple vista se sabe si fueron curados correctamente por su densidad y colores, que pueden ser brillantes con pistas rojas, rosas, azules, morados y con los pistilos color naranja, comúnmente llamado “pelirrojos”. La flor se cura normalmente por un periodo de treinta días.
Al tocar los buds, es fácil darnos cuenta de su calidad por su textura aceitosa y pegajosa, que incluso “pinta” los dedos de color verde. Las cepas ricas en CBD o THC tiene un olor fuerte, dependiendo del tipo de terpeno que las caracteriza.
Estas son las características que debes identificar en la calidad de tu “bud”:
· Aroma
· Tricomas
· Podado
· Curado
· Humedad
· Color
· Densidad
· Precio
Existen cuatro métodos de inhalación de cannabis: Ya sea a través de un cigarrillo (joint), de una Pipa, de un Bong o un Vaporizador.
Antes de fumar, es importante hablar un poco de los accesorios más comunes que se utilizan en la “cultura de cannabis”: Primero se necesitará un encendedor (los cerillos son efectivos, pero pueden alterar el sabor).
El segundo paso será utilizar un “molinillo” o “grinder”, donde se deberá colocar el bud para desmembrarlo y poder rellenar el cigarrillo.
Los frascos para guardar y cuidar tus flores, son muy útiles ya que servirán para protegerlas de contaminación externa, ya que permiten que el “curado” continué y permanezcan frescos durante semanas e incluso meses. Te recomendamos que cada cepa sea separada de la otra para que no se mezclen los sabores y olores, algunas personas utilizan sobres especiales para control de humedad.
Una vez que se tiene el “molinillo”, el siguiente paso es contar con papel para enrollar tu cigarrillo. Este paso puede ser de dos maneras: la primera es comprar “conos vacíos” (imagen) ya previamente enrollados y con el tamaño de tu preferencia y la segunda es que tú los hagas colocando el papel y el filtro. Los papeles para enrollar están hechos de papel de arroz, de cáñamo, de pulpa de madera o esparto.
Una vez que hayas realizado todo este proceso casi artesanal, deberás agregar un pequeño filtro a tu cigarrillo, para prevenir que la cannabis molida entre en tu boca.